El Frente de Sindicatos de las Universidades Nacionales rechazó el 6% de aumento salarial que propuso el Gobierno nacional, a cobrar con los haberes de febrero, y que se suma al 10% para este mismo mes acordado en la paritaria de diciembre. Además exigió que en forma urgente las autoridades presenten un ofrecimiento acorde a la pérdida salarial del sector.
En audiencia paritaria que se realizó este viernes, el Gobierno nacional propuso un incremento del 6% para el mes de febrero, que se suma al 10% ya acordado en paritaria firmada en diciembre pasado con el gobierno anterior.
El Frente de Sindicatos de las Universidades Nacionales –que integra Conadu– rechazó de plano ese ofrecimiento, ya que un 16% resulta absolutamente insuficiente frente a la inflación acumulada de los meses de diciembre y enero, que fue superior al 50% y que representa la mayor pérdida del poder adquisitivo para nuestro sector desde que existen registros.
“Lo mínimo que reclamamos es que nuestros salarios no pierdan respecto de la inflación. La propuesta del Gobierno está muy lejos de esa equiparación”, expuso el Frente.
Además, exigió al Gobierno nacional que convoque de urgencia una nueva instancia paritaria en la que haga un ofrecimiento acorde a la pérdida salarial.
Fonid
Durante el encuentro paritario, el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, ratificó la decisión de Nación de no transferir a las provincias los recursos correspondientes al Fondo de incentivo docente (Fonid). Ese incentivo representa un porcentaje importante del salario preuniversitario y su quita implicará un recorte en el salario de la docencia preuniversitaria.
El Frente de Sindicatos de Universidades Nacionales también rechazó esta pretensión y exigió que se haga efectivo el pago del Fonid para los meses de enero y febrero, y se acuerde una recomposición del Fondo de manera urgente. Reclamó además la actualización de las garantías salariales de ambos sectores.
Asimismo, responsabilizó al Gobierno Nacional por la situación conflictiva generada al pretender que se acepte la pérdida salarial. “Este conflicto ocurre en un contexto de recorte del presupuesto universitario que pone en riesgo el normal funcionamiento de las universidades nacionales. Defendemos la universidad pública y gratuita al servicio de las grandes mayorías, salarios dignos para trabajadoras y trabajadores y jubilaciones dignas”, subrayó.